ACORDES PARA QUEZA

ACORDE #1
Agujas de pino clavadas en la piel, un espeso aroma de blanca gardenia, el espacio se deshace en sombras, la oscuridad es desbordante y rota. 
Como hacer para no desviarnos, para no perdernos en las vías?, como libélulas en la noche con su faro incandescente, como agua y vapor, vapor nocturno que se esparce en la penumbra. 
Adonde vamos a parar después del amanecer en el que los sueños se vuelven olvido y el olvido se vuelve polvo?.

ACORDE #2
Tenue brisa marina, mi transpirar es de sal y alga, de corriente enmudecida. Bebo el agua y rasguño la arena, que resplandece como el brillo cristalino de una alucinación en la espesura y en el clamor nocturno cuando los tambores resuenan en mi interior. 
Una luna como un aguijonazo en el cielo, las estrellas titilan con percusión danzante.  
El vacío profundo estrellado de hielo y silencio, donde el humo produce escozor, estoy tratando de encontrar la luz que sobre pase el limite de la tristeza, pretendo levantar vuelo para no caer al vacío.

ACORDE #3
Soledad marchita y reseca, que emana calor de los amarillos y lánguidos muros, donde nos aferramos para no caer.
Y caer a donde?, al pozo negro de sombras desbordantes...
Recuerdas cuando hablábamos con la luz apagada al ritmo de los hilos invisibles de nuestra diario trasmitir.  
Añoro tu perfume de dalia, tu mirada inquieta, tus silencios en los que trataba de descifrar cada uno de tus pensamientos. 
Entonces responde: Es este el vacío que nos espera?, como puedo hallar la salida del laberinto encantado?. 
Solo quiero ir tras tu respirar de ala batida al viento, perseguir tus pisadas, esas que dejaste la mañana de verano en medio del bosque.
Las hojas crujen a tu paso, estoy inquieta tratando de encontrar las respuestas.

ACORDE #4

Hordas de humo y oxido que se expanden en la memoria de mi ser, me encandila la luz que emana de tu indigo, soy la hoja que danza en la oscuridad al vaivén de mil latidos, como lagrimas envueltas en nebulosa que con su dulce aroma encierran mi alma en una botella submarina traslúcida y brillante.

Soy la gota de rocío húmedo, que se desliza sobre el cristal.
Soy el puente que se incendia a tu paso, el árbol que te susurra en las noches de canto de rana y oleadas de grillos.
Soy el vibrante sonido en las vías del tren que se sacude en un clamor oscuro y sombrio.
Impaciente fijo la mirada en un horizonte perdido donde el sol tostado de la tarde me ciega y enmudezco al anochecer como estrella temblorosa que se condensa con mi respirar, las palabras se las lleva el viento en danzante sinfonía de sentir y emoción, en un insolito abismo que se funde en la piel y la sangre emana como cascada de cera y ardor.
Te veo pasar envuelta en un silencioso pétalo de flor andante.
Pongo una entonación en mi recuerdo para que no desaparezca tu dulce aliento.

ACORDE #5
Corre bajo tus pies un remolino de agua traslúcida como brillo de libélula en una mañana de fino relente, estoy tratando de dibujarte con palabras en medio de una tempestad de trueno y granizo, que como balas de plomo rasguñan mi sentir y se instalan en mi emoción.

Escucho con calma los susurros que se entierran en mi alma como puñales envenenados, y caigo, caigo, caigo... 
Todo es oscuro, húmedo, te busco en medio de mi caída temblorosa, te busco en el color de escama y pez, en las imagenes que con luz de flash encienden mi memoria y alimentan mi apetito de ligero sentir.

Quiero dejar de tejer las fibras de mis pensamiento, alborotar un avispero, correr desnuda en medio de una gélida noche para sentir tu aliento, acostarme en las vias del tren para que tu murmullo invada mi interior, caminar descalza en un campo rebosante de margaritas danzarinas, rodar ladera abajo sintiendo el olor del prado verde y la picazón de la hierba en mi cuerpo, nadar en una noche explosivamente estrellada, en un mar aguamarina y contar las estrellas hasta perderme en ellas y en ti, deslizar las manos en la blanca arena, oler un melon maduro, treparme en un árbol y sentir el preludio del viento en mi tacto, para poder visualizarte a través de la bruma de mis recuerdos y emociones. 
No sabes como te extraño, enloquezco a tu recuerdo. 

ACORDE #6
Mil caballos cabalgan al compás de tu memoria, al unísono entonan la melodia de tu voz.
La afinada lava derrite todo a su paso, como cántico que rechina en la oscuridad marina, como mástil con su vela al viento, me dejo llevar hacia tu costa de tenue ola y fina arena, imprimo tu olor como matiz que se esparce sobre papel.
Los pájaros revolotean en cielo tembloroso, una mariposa se posa en mi hombro, quizá esa sea la señal que tanto esperaba  para poder captar mas allá de la simple materia, por que un inocente suspiro despierta en mi un remolino de delirio y grandeza.